Indicaciones para coronas dentales
Las coronas dentales son uno de los tratamientos restauradores más versátiles y comunes en odontología moderna. Sin embargo, muchos pacientes no están seguros de cuándo exactamente necesitan una corona en lugar de un empaste simple u otro tipo de restauración. Comprender las indicaciones para coronas dentales le ayudará a tomar decisiones informadas sobre su salud oral y a entender las recomendaciones de su dentista.
Después de un tratamiento de conducto
Una de las indicaciones más comunes para una corona dental es después de realizar un tratamiento de conducto. Durante este procedimiento, el dentista remueve la pulpa dental y los nervios del diente, dejando solo la estructura dentinaria. Sin el aporte sanguíneo de la pulpa, el diente se vuelve más frágil y propenso a fracturas con el tiempo. Una corona dental protege el diente tratado y restaura su resistencia estructural completa.
Los molares y premolares que han recibido tratamiento de conducto casi siempre requieren coronas debido a las fuerzas masticatorias intensas que soportan. Los dientes anteriores pueden no necesitar coronas inmediatamente después del tratamiento de conducto si tienen suficiente estructura dental remanente, pero eventualmente pueden requerirlas a medida que la dentina se debilita con el tiempo. El costo de un tratamiento de conducto más corona en Colombia oscila entre $800.000 y $2.500.000 COP, dependiendo del diente y el material de la corona.
Dientes severamente cariados
Cuando una caries dental es muy extensa y ha destruido una porción significativa de la estructura del diente, un empaste tradicional ya no es suficiente para restaurar el diente adecuadamente. Si más del 50 por ciento de la corona dental natural está comprometida por caries, generalmente se recomienda una corona completa en lugar de una restauración grande. Los empastes extensos tienen mayor riesgo de fractura y pueden no proporcionar el sellado adecuado necesario para prevenir caries recurrentes.
Su dentista evaluará la cantidad de estructura dental sana remanente mediante examen clínico y radiografías. Si la caries se extiende profundamente hacia la dentina o cerca de la pulpa dental, puede ser necesario realizar primero un tratamiento de conducto antes de colocar la corona. En casos donde hay suficiente estructura dental pero no lo suficiente para un empaste convencional, opciones intermedias como incrustaciones u onlays pueden ser apropiadas antes de proceder a una corona completa.
Dientes fracturados o agrietados
Las fracturas dentales son una indicación común para coronas. Los dientes pueden fracturarse por trauma directo, morder objetos duros, bruxismo nocturno o simplemente por debilitamiento con la edad. Las fracturas pequeñas en el esmalte pueden repararse con material de resina compuesta, pero las fracturas que se extienden hasta la dentina o que comprometen cúspides completas generalmente requieren coronas para restaurar la función y prevenir fracturas adicionales.
Los dientes agrietados, incluso sin fractura visible, también pueden requerir coronas. Un síndrome de diente agrietado se caracteriza por dolor al morder o masticar que desaparece cuando se libera la presión. Estos dientes tienen microfracturas que se propagan bajo presión, causando dolor intermitente. Una corona bien ajustada puede estabilizar el diente agrietado, prevenir la progresión de la fractura y aliviar el dolor. Sin tratamiento, estas grietas pueden profundizarse hasta requerir extracción dental.
Mejoras estéticas
Las coronas también se utilizan para mejoras estéticas cuando los dientes tienen problemas que no pueden corregirse satisfactoriamente con otros tratamientos menos invasivos. Dientes severamente manchados que no responden al blanqueamiento, dientes con malformaciones, tamaño o forma inadecuados, o dientes con múltiples restauraciones antiestéticas pueden beneficiarse de coronas estéticas. Las coronas de porcelana o zirconio pueden transformar completamente la apariencia de dientes comprometidos.
En diseños de sonrisa, las coronas juegan un papel fundamental para crear resultados estéticos dramáticos. Pueden corregir problemas de alineación leve sin necesidad de ortodoncia, cerrar espacios entre dientes, alargar dientes desgastados o cortos, y crear una línea de sonrisa armoniosa. El costo de coronas estéticas en Colombia varía entre $900.000 y $1.800.000 COP por diente, dependiendo del material y la complejidad del caso.
Como anclaje para puentes
Las coronas también sirven como pilares para puentes dentales cuando se necesita reemplazar dientes perdidos. Los dientes adyacentes al espacio vacío se preparan y cubren con coronas que están conectadas al diente de reemplazo artificial. Aunque esta aplicación es menos común ahora que los implantes dentales son más accesibles, los puentes soportados por coronas siguen siendo una opción válida en situaciones específicas.
El proceso de colocación
El procedimiento de colocación de una corona típicamente requiere dos citas. En la primera visita, el dentista prepara el diente removiendo una capa externa de esmalte para crear espacio para la corona. Se toma una impresión detallada que se envía al laboratorio dental donde se fabricará la corona personalizada. Se coloca una corona temporal para proteger el diente durante las 2 a 3 semanas que toma fabricar la corona definitiva.
En la segunda cita, se remueve la corona temporal, se prueba la corona definitiva para verificar ajuste y color, y si todo está correcto, se cementa permanentemente. Con sistemas CAD-CAM modernos disponibles en algunas clínicas colombianas, es posible fabricar y colocar coronas de zirconio en una sola visita, eliminando la necesidad de coronas temporales y reduciendo el tiempo total de tratamiento.
Conclusión
Las coronas dentales son necesarias en diversas situaciones: después de tratamientos de conducto, para restaurar dientes severamente cariados o fracturados, como anclaje para puentes, o para mejoras estéticas. Si su dentista recomienda una corona, es importante entender que esta restauración no solo mejora la apariencia sino que también protege y fortalece el diente, potencialmente salvándolo de la extracción. El costo de una corona es una inversión en la longevidad de su diente y su salud oral general.